Buenos días Luis,
sexo es vida dicen, pero de momento a ningún concejal se le ha ocurrido programar un show erótico en un parque, con acceso libre y a las cinco de la tarde. Seguramente, si sucediera, alguien lo defendería señalando que no hay mayor libertad de expresión que dos personas haciendo el amor. Supongo que seguimos en dos Españas, la del todo vale y la del nada vale; siempre teniendo en cuenta si los que lo hacen son de los míos o no.
Sobre los enaltecimientos, hace unas semanas vi en la televisión la película Malditos Bastardos, de Quentin Tarantino, y nadie lamentó la continúa exhibición de esvásticas. ¿Hubo enaltecimiento del terrorismo en la obra de los títeres? Lo dudo. ¿Debería dimitir Celia Meyer? Lo dudo también. Una vez que ha destituido a la persona sobre la que delegó la responsabilidad de la programación del carnaval, estoy seguro que en el futuro se cuidará muy mucho sobre a quién contrata y para qué.
Un saludo.