A las trincheras del share

Buenos días Luis,

Ya estamos otra vez en campaña electoral, qué ganas de que llegue el día veintiuno. En 2015 hemos vivido, o sufrido según se mire, las elecciones andaluzas, las municipales, las autonómicas y las catalanas, para desembocar en diciembre en las generales. Parece que estos se han convertido en los comicios de la televisión, medio tomado, y casi secuestrado diría yo, por algunos de los candidatos. Tras ver a Rajoy jugando al futbolín, a Rivera sufriendo un accidente en un rally o a Pablo Iglesias tocando la guitarra, no sé qué nos queda por ver ni qué formato pueden asaltar en estos días. Quizás aspiren también a aparecer en la casa de Gran Hermano, ni mucho menos podemos descartarlo.

Lo que sí hemos tenido, y vamos a tener, son debates. A dos, a tres, a cuatro, a nueve…enfrentamientos que, teniendo los programas electorales en la mano, tampoco tienen mucho sentido. A través de una simple tabla comparativa cada ciudadano puede establecer qué partido se ajusta más a sus exigencias, sin necesidad de aguantar los dimes y diretes ni los reproches del pasado de los candidatos.

Y no queramos mencionar los posibles pactos que se pudieran dar tras las elecciones, porque en ese caso de nada habrán valido los debates ni los programas electorales. De llegar a este punto, ¿qué medidas se van a mantener y cuáles no? Ninguno se atreve a decirlo, o no tiene tiempo para ello; al fin y al cabo, estos días están más preocupados por ver quién ocupa una mayor cuota de pantalla.

Un saludo,

Daniel De Andrés